Nos presentamos juntos:
Por fin pude hacer la ruta del silencio, aunque nos mojamos un poco y fuimos con mucho cuidado.
La primera ruta con ella ha sido un finde y 800km.
Los primeros km me sentía un poco “estresado” por la nueva montura, me notaba que quizá hacía algunas reducciones innecesarias, será el vicio de venir de un tetracilindrico, pero poco a poco me fui adaptando. El domingo que tuvimos más curvas ratoneras disfruté “como un gorrino en un charco”
Eso si, algo raro hay con el freno trasero…no sé si es la postura que suelo llevar del pie o que pasa, es como que me cuesta encontrar el pedal de freno y al final acabo casi sin usarlo y me hace entrar un poco cuadrado en las curvas. También es verdad que llevo una conducción tranquila y suelo abusar poco de los frenos, e imagino que con un bicilindrico lo haré algo menos.
Continuará….
Saludos
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